SE TRASPASA XI.

Pieza en doce libaciones para licuar a la piedra en su mal.

(Por ABUELO, que me ha dejado el oxígeno para volar como en viejos tiempos, pero esta vez en alas más cariñosas).

...agarrado como una garrapata a las alas de NEMO, y blandiendo un plátano sin pelar: "¡Ven aquí, granujilla, no saldrás impune de tamaño desmán! ¿has visto cómo me has puesto el suelo?"...
Con la música en las sienes, el ruido en los ojos y el extraperlo abombándoles los tímpanos, todos los demás permanecieron como atontados en medio de aquel panorama en el que todo había quedado reducido a polvo blanco, tras el paso de semejante pulpo de brazos pantagruélicos, por gigantes y por voraces. Todo parecía cubierto por eso que se llama hielo seco, esa cosa rara que en contacto con el agua normal desparrama una nube pesada y móvil que repta alrededor de los atrevidos.
"¡Mas no importa, dijo Dip Turpin disfrazado de camello-OZO, subiremos por la claraboya, y mientras ellos pierden el tiempo nosotros nos dedicaremos a colocar cada una de las piezas de la pared en el álbum de sellos que heredamos de nuestros antepasados". "¡No me pises, granuja" gritó la barbitúrica BESTIAPARDA. "¡Pues te vas a fastidiar", le contesta NUBEBLANCA, "yo soy el único capaz de sacar el aire hacia adentro y sin romper el fondo". Y además, dime, "¿para qué sirve comprarse una colección de gabardinas?. Vamos a dejarnos de estereotipos, y al tajo!"
..Y chuparon durante años. Y de tanto chupar, los pelos se le iban quedando a LAPALO pegados en la lengua y acabó por liarse: ya no sabía si se había tragado el felpudo o si estaba chupando el cepillo de los zapatos.
Y de reprente llegó MAC, con MARMOTA metida en el bolsillo para disimular el dolor de muelas pues había estado comiéndose las uñas en los últimos doce meses: "pasen más adentro, oiga, que al fondo hay sitio!"
Pero ¡adónde vais, criaturas dispersas, dónde pensáis esconderos en este mundo de batracios y escorpiones? Vuestros ojillos vivaces, vociferantes y asustados resaltan indefectiblemente en la puntita de vuestras antenas, bajo el fulgor de la...lúa, lúa, luz azul, que por fría nos abrasas...empezaban a cantar a siete voces LALA y TRISKEL para auyentar las apariciones que cada vez eran más frecuentes. Y al son de la flauta, no mágica pero casi, y de los trinos y gorgeos, fuéronse yendo todos cantando al unísono: somos flores, somos rosas, somos lindaaas mariposaaaas...y así, cuando ya casi estaban dando alcance a la terrible Bobcat T-6000, se dieron cuenta, y solo entonces, de que se habían dejado al pobre BATISCAFO en el fondo de la bañera...