SE TRASPASA VIII

Doce raras heridas, doce, para emancipar de su desdicha a la Piedra.

O de cómo se fació de las entradas la octava.


... y entonces, con los ojos llenos de lágrimas y mirando fijamente a BESTIAPARDA, embriagado de emoción, agarra su extraño pendiente con una mano y llevándose la otra a su henchido corazón comienza a entonar:

Como una promesa... eres tú... eres tú...
como una mañana de verano...
como una sonrisa... eres tú... eres tú...
así, así... eres tú...
...

De pronto, ese maravilloso momento que a todos había invadido, absortos por la sedosa voz de TRISKEL, enamorados por el instante que había hecho flotar en el ambiente atisbos de cordura, melancolía y paz, se ve truncado por la repentina detención de su cántico. La cabeza le gira 360 grados ad dextrorum y luego 360 ad contra dextrorum, volviendo así a su posición original. Unos párpados verticales abren y cierran rápidamente sus ojos -los 3-. Todos se miran con sospecha.

-Aquííí va a pasar algooo... -parece que susurrara la pequeña Drew Barrymore reencarnada ahora en LAPALO.
-¡¡Más madera, es la guerra!! ¡¡Es la guerra!! -grita súbitamente TRISKEL mientras sus ojos se convierten en esferas negras.
-¡TRISKEL! ¡TRISKEL! ¿Estás bien? -pregunta asustado BATISCAFO.
-Imposible -dice LALA tranquilizándolo poniéndole la mano en uno de sus hombros.
-¿Cómo?
-Digo que es imposible. No puede oírte.
-¿Por qué?
-Está en trance. Temo... otra virgen.
-¡¡Más madera, es la guerra!! ¡¡Es la guerra!! ¡¡Virgen de La Encina, acógenos en tus brazos enramados, arrópanos con tus dedos en-hojeados, aliméntanos con las bellotas fruto de tu amor!! -es un guarro, le murmura LALA al oído. -¡¡Salva a la Piedra de su Mal y a nosotros con ella!!
-Está en trance. Y además es un guarro. Te lo he dicho. Y así, hasta que se le aparezcan las 100 vírgenes que le prometieron. Luego, lo mismo, se inmola. Y eso no mola nada porque lo va a dejar todo perdido.
-¿Y cuántas vírgenes lleva? -espetó OZO algo cansado, recogiendo sus alas y poniendo los brazos en jarra.
-84.
-Dicen que cuando se acerca la Virgen de La Encina, el invierno está que se avecina -interrumpió PEGGY haciendo alarde de su sabiduría en los dichos populares.

En ese preciso momento, justo en ese preciso momento, dejó de nevar y salió un sol radiante. Un sol que a todos cegó. El silencio, de nuevo, se hizo dueño del lugar.

NEMO, que estaba a punto de saltar desde lo alto de la madreselva, dejó de batir sus alas y se quedó inmóvil, justo en el borde; MAC, NUBEBLANCA y ABUELO, que habían hecho una sentada reivindicando que querían gambas en el cocido y garbanzos en la paella, empezaron a entonar canciones a los espíritus que habitaban en las montañas de Wisconsin mientras el resto de los presentes se preguntaban: "¿Por qué después de 3 platos y un postre te ponen sacarina en el café?"

Sólo había una persona que sabía exactamente la respuesta a esa pregunta. Y dormía cual MARMOTA.